Juan Gelman, ícone da resistência argentina (1930-2014)

O escritor argentino Juan Gelman, de 83 anos, ícone da resistência à ditadura, morreu na noite desta terça-feira (14), no México. Segundo a agência EFE, uma fonte ligada à família informou que o poeta e jornalista sofria de uma doença chamada síndrome de mielodisplasia. 

Morre poeta Juan Gelman, ícone da resitência à ditadura argentina - Reprodução

Gelman, vencedor do Prêmio Cervantes (2007) e do Prêmio Rainha Sofia de Poesia Ibero-Americana (2005), foi obrigado a se exilar em 1975 na Itália, pois era perseguido pela Aliança Anticomunista Argentina (AAA ou Triple A). Nos anos 1960, Gelman fez parte das Forças Armadas Revolucionárias (FAR) e, posteriormente, do Movimento Peronista Montonero (MPM), na Argentina.

A Triple A era um esquadrão da morte de extrema direita que atuou principalmente durante a Presidência de Isabel Perón (1974-1976) e tinha como principal objetivo desestabilizar o governo através do assassinato de políticos e partidários da esquerda, como artistas, intelectuais, escritores, estudantes, historiadores, entre outros.

Seu filho Marcelo Ariel e a esposa, María Claudia Iruretagoyena foram mortos pelo regime ditatorial. Sua neta, nascida enquanto os pais estavam presos no Hospital Militar de Montevidéu, esteve desaparecida até ser encontrada em 200 por Gelman. Macarena, foi criada pela família de um policial uruguaio, que escondeu dela sua verdadeira identidade.

Após o exílio, Juan Gelman viveu ainda na França e finalmente no México. Leia a seguir (em espanhol) um de seus poemas:

Fidel (1962)

Dirán exactamente de Fidel
gran conductor el que incendió la historia etcétera
pero el pueblo lo llama el caballo y es cierto
Fidel montó sobre Fidel un día
se lanzó de cabeza contra el dolor contra la muerte
pero más todavía contra el polvo del alma
la Historia parlará de sus hechos gloriosos
prefiero recordarlo en el rincón del día
en que miró su tierra y dijo soy la tierra
en que miró su pueblo y dijo soy el pueblo
y abolió sus dolores sus sombras sus olvidos
y solo contra el mundo levantó en una estaca
su propio corazón el único que tuvo
lo desplegó en el aire como una gran bandera
como un fuego encendido contra la noche oscura
como un golpe de amor en la cara del miedo
como un hombre que entra temblando en el amor
alzó su corazón lo agitaba en el aire
lo daba de comer de beber de encender
Fidel es un país
yo lo vi con oleajes de rostros en su rostro
la Historia arreglará sus cuentas allá ella
pero lo vi cuando subía gente por sus hubiéramos
buenas noches Historia agranda tus portones
entramos con Fidel con el caballo

Epitáfio

Un pájaro vivía en mí.
Una flor viajaba en mi sangre.
Mi corazón era un violín.

Quise o no quise. Pero a veces
me quisieron. También a mí
me alegraban: la primavera,
las manos juntas, lo feliz.

¡Digo que el hombre debe serlo!

Aquí yace un pájaro.
Una flor.
Un violin

*Texto alterado às 14h, de 17/01/14, para acréscimo de informação

Da redação do Vermelho,
Com informações da agência EFE